El dominico Giordano Bruno, sacrificado en la hoguera por la Inquisición en 1600, dijo: «Las religiones no son más que un conjunto de supersticiones útiles para mantener bajo control a los pueblos ignorantes». Ciento cincuenta años después Voltaire, filósofo francés, escribía: «La religión existe desde que el primer hipócrita encontró al primer imbécil»...

miércoles, 7 de marzo de 2012

¿Qué hace un alcalde en ese Camino…? ¿En nombre de la Ciudad…?


"El alcalde dio la bienvenida a los 3.000 participantes en el encuentro del Camino".

El alcalde de San Fernando, José Loaiza, acompañado del teniente de alcalde de Desarrollo de la Ciudad, Ángel Martínez, dio la bienvenida "en nombre de la ciudad" a los participantes en el encuentro del Camino Neocatecumenal, un evento que durante un día congregó en San Fernando a casi tres mil personas procedentes de las distintas parroquias que acogen comunidades en el campo de acción de la Diócesis de Cádiz-Ceuta.

El acto litúrgico, celebrado en el pabellón de Bahía Sur, fue presidido por el obispo, Rafael Zornoza Boy, que de esta forma, también mantenía su primer encuentro con las comunidades del Camino Neocatecumenal desde su nombramiento al frente de la Diócesis.

El responsable del Camino Neocatecumenal en la provincia, Juan de Mena, agradeció públicamente al alcalde el apoyo recibido del Ayuntamiento isleño para la celebración de este encuentro. "Sin la inestimable ayuda del Consistorio de San Fernando hubiera sido imposible llevar a cabo este acto, por lo que les estamos muy agradecidos", aseguró.

En su nombre y en el de los sotanillas de su gobierno SI o SI

En nombre de la Ciudad NO, como alcalde NO (Art. 16-3 de la Constitución Española

1 comentario:

  1. me encanta observar los gestos de éstos que asisten a encuentros divinos en la tercera fase. Siempre me pregunto el motivo de ladear la cabeza cuando oyen los soliloquios del representante celestial. Siempre tuve curiosidad en analizar la posición de sus manos y sus brazos y, bien sabe dios que, daría un trozo de mi misterio por saber y escudriñar sus mentes cuando los de la sotana pregonan humildad, caridad y fe. ¿Somos, para ellos, decentes, por no creer en su dios? Espera Alba, que se me antoja ahora a mi, ladear la cabeza.

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